Mira que el miedo nos hizo cometer estupideces,
nos dejó sordos y ciegos tantas veces.
Y un día después de la tormenta, cuando menos piensas sale el sol.
De tanto sumar pierdes la cuenta, porque uno y uno no siempre son dos.
Cuando menos piensas sale el sol.
No hay mal que dure cien años,
ni cuerpo que lo aguante.
Y lo mejor siempre espera adelante...
nos dejó sordos y ciegos tantas veces.
Y un día después de la tormenta, cuando menos piensas sale el sol.
De tanto sumar pierdes la cuenta, porque uno y uno no siempre son dos.
Cuando menos piensas sale el sol.
No hay mal que dure cien años,
ni cuerpo que lo aguante.
Y lo mejor siempre espera adelante...